Posted on septiembre, 01 2023

La transición hacia un modelo productivo no basado en petróleo, gas y carbón en Colombia implica necesariamente encontrar una actividad económica que genere, en el corto plazo, más de 50 billones de pesos colombianos (COP) del producto interno bruto (PIB) anualmente y, al menos, 200.000 empleos directos con carácter regional.

También implica encontrar una fuente permanente de ingresos para el Gobierno nacional central de al menos 1,6% del PIB anual y de 1,5% del PIB para las finanzas territoriales, con el fin de no hacer insostenibles los balances fiscales y la inversión pública en el país.

Este documento elaborado por WWF Colombia, ‘Recomendaciones para la Política de Transición Energética de Colombia’, aborda la transición energética en el país y cómo esta puede ser sostenible y rentable bajo circunstancias nacionales. Discute, además, la importancia de considerar el contexto geopolítico, las perspectivas económicas, los derechos humanos y de la naturaleza, entre otros factores, en la transformación económica que tendrá impactos sociales y ambientales.

Estas recomendaciones hacen referencia también a reformas normativas en la política pública tributaria y de gasto para orientar esfuerzos de sustitución, mejoras en la eficiencia y acciones de conservación necesarias que el país podría requerir. Adicional a esto, el documento destaca la importancia de trazar un plan conjunto entre las comunidades y el Gobierno para la recuperación y cuidado del medio ambiente, así como la prevención de daño ambiental, reconociéndolas como agentes claves en las acciones contra el cambio climático, enfocando dicho reconocimiento a la producción ecológica y la economía de los entornos en ecosistemas estratégicos.

Por último, esta publicación hace énfasis en que las necesidades de reducción de emisiones de gases de efecto invernadero en Colombia son diferentes a las de los países desarrollados, ya que en Colombia la mayor fuente de emisiones de GEI proviene del sector agricultura, silvicultura y otros usos de suelo.

En las conclusiones, se presentan recomendaciones para una política energética sostenible y rentable para el país, como la promoción de la producción de energía renovable, la implementación de medidas de eficiencia energética, la promoción de la movilidad sostenible y la reducción de emisiones en la industria con una transformación productiva compatible con el clima y que proteja la naturaleza y la sociedad, buscando garantizar una fuente permanente de ingresos para el Gobierno nacional y las finanzas territoriales durante la transición energética.