Grandes logros 2019: Sabanas y Pastizales

Posted on diciembre, 20 2019

​Hemos logrado que las sabanas de la Orinoquia cada vez sean más reconocidas como un ecosistema clave para el país. Y estamos actuando, por ejemplo, al rescatar las buenas prácticas de un tipo específico de ganadería donde la producción convive con la naturaleza.
Hemos logrado que las sabanas de la Orinoquia cada vez sean más reconocidas como un ecosistema clave para el país. Y estamos actuando, por ejemplo, al rescatar las buenas prácticas de un tipo específico de ganadería donde la producción convive con la naturaleza. 
  
Después de El Cerrado en Brasil, las sabanas de la Orinoquia son las más extensas de Suramérica. Para continuar conservando este tesoro natural es necesario tener en cuenta tres aspectos: la biodiversidad, el cambio climático y la producción de alimentos. Por ello, este año, apoyamos la creación del programa OSIL (Orinoquia Sustainable Integrated Landscapes) que justamente trabaja para planear cómo y dónde sembrar o criar ganado, garantizando que los ecosistemas no se vean afectados y teniendo presentes todos los desafíos de la actual crisis climática.  Hay que entender qué tanto carbono almacenan las sabanas. Resulta que ya existe una amplia información sobre el almacenamiento de carbono en bosques, pero hay una alta incertidumbre sobre las sabanas. Así que al entender este proceso se podrá avanzar para protegerlas mejor. 


© Jorge García  
 

Adicionalmente, hemos logrado demostrar que sí existen formas de conservar los ecosistemas al tiempo que se hace un aprovechamiento productivo, con base en los conocimientos de la cultura llanera colombiana. Como resultado, junto con la Fundación Horizonte Verde, hemos lanzado una publicación sobre ganadería climáticamente inteligente que, además, es una guía para que los productores puedan integrar buenas prácticas que benefician directamente su producción y, a la vez, a las sabanas.
La Aurora, Casanare. Colombia.
© Day's Edge Productions / WWF-US
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